domingo, 15 de enero de 2017

¿Vale la pena ver las películas de Resident Evil?



¿Vale la pena ver adaptaciones? este es un tema que ha permanecido desde que las adaptaciones han defraudado o han cambiado de un todo las historias originales (ya sean libros, películas, videojuegos, entre otras). Y Resident Evil
no es un ejemplo cualquiera, pues hablamos de una franquicia exitosa que comprende videojuegos, cómics, novelas, películas y coleccionables. Originalmente como videojuego, Resident Evil nació en 1996 gracias a su padre Shinji Mikami de la mano con la desarrolladora Capcom. Franquicia que surgió como exponente moderno del género del terror del cuerpo y el psicológico, en el contexto de una historia llena de zombis y una empresa que se dedica a sus experimentos; pero… ¿Qué ocurre con Resident Evil en sus adaptaciones filmográficas? A continuación mi apreciación:

Para hablar de las adaptaciones filmográficas de Resident Evil no se puede dejar de mencionar a su director Paul W. S. Anderson, pues no sólo dirigió la primera, sino que también siguió participando como productor y escritor en las secuelas en donde no participó como director (hasta Resident Evil: Afterlife, en donde volvió a dirigir al igual que sus siguientes secuelas). Siempre he pensado que, para evaluar una película, antes hay que ver quiénes son los creadores o responsables de ella. Anderson es un director que ha sido famoso por las adaptaciones de Resident Evil, detrás de ello existen obras como Alien vs. Predator, y la primera adaptación que hizo a base de un videojuego, Mortal Kombat (1995) del cual surgieron criticas mixtas pero que al final se convirtió en una película de culto; sin embargo es un director con fracasos, películas como Event Horizon y Soldier. Sin darle mucha vuelta al asunto, es sin duda un director dedicado a la ficción y la acción extrema, y en mi apreciación personal esto último es lo que ha hecho que parte de los fans de Resident Evil desprecien las adaptaciones filmográficas de la saga. Pues Resident Evil no surgió de la acción, surgió del terror como protagonista, más allá de las acciones de sus personajes o en lo que se envuelve el contexto de la historia, el terror es lo más importante que se aprecia en sus orígenes (en los videojuegos).

La adaptación filmográfica de Resident Evil, que nació en el 2002, fue sin duda un ingenio por parte de su director, pues recreó una historia libremente basada en el videojuego, una historia prácticamente dependiente, ¿pero qué falló? Era una película con más acción que terror (personalmente no le veo el terror, pero así está calificado como genero), y si para los amantes del horror ésta película fue una decepción para aquel entonces, no se podían imaginar lo que se aproximaba en años posteriores. Resident Evil fue adaptada en su historia con 5 películas más (sin contar el próximo estreno de Resident Evil: The Final Chapter para el 27 de enero). El historial de críticas que les hicieron a las múltiples secuelas es de una valoración mixta. No ha sido una adaptación perfecta, pero tampoco ha sido una para botar a la basura. Ya Anderson nos hizo comprender que, sus adaptaciones de Resident Evil no son una copia del terror de su original, sino una adaptación libre. Entonces, es aquí donde reflexiono con la pregunta ¿vale la pena ver las películas de Resident Evil?, diría que sí. Pero este “SI” es con una aceptación de que no es Resident Evil en esencia, sino una adaptación que recogió elementos de la franquicia y las envolvió en el género de la acción (es curioso que el videojuego Resident Evil 4, fue un cambió de la saga, aparte de la historia y la jugabilidad, el género; introdujeron la acción en equilibrio con el terror, y a partir de allí el videojuego cambió más al género  acción). Y si la apreciamos en su individualidad como película, vemos que no es tan mala como parece. Es sustanciosa, y aparte de esto, efectiva comercialmente. Pero tengo una apreciación que no se si calificarla de buena o mala, últimamente (en específico las 2 últimas secuelas) han introducido mucho más elementos de la franquicia original de Resident Evil, me explico, personajes y enemigos. Ahora, esto último se puede traducir de la siguiente manera: tratar de captar al público que tiene más apego a los videojuegos de dicha saga, o en el peor de los casos, falta de creatividad para seguir con la historia. 

Sin embargo, considero que las adaptaciones filmográficas (como ya lo había explicado antes), no son una mala opción para disfrutar de una historia ambientada en el mundo Resident Evil. Y ahora con la próxima entrega de Resident Evil: The Final Chapter, que pretende ser la última entrega de la misma. Veremos qué nos ofrece Anderson con su historia apocalíptica, y de una Alice frente a los devastadores experimentos de la Corporación Umbrella. En fin, considero que las películas de Resident Evil tienen cuerpo suficiente (y eso lo ha demostrado su vigencia) para que se valoren, y sean parte de la cultura pop de este mundo ficticio de zombis, pero no es lo mejor que existe en este mundo.


2 comentarios:

  1. Vaya vaya... Bueno, le daré una oportunidad a las películas. Quien sabe, tal vez terminen gustándome.

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    1. Lo mejor es darles una oportunidad y formar ese criterio. Desde luego que no tienen la misma calidad que los videojuegos, pero independientemente de eso, valen la pena. Un saludo!

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